El amor dominguero de Etta James

Por: Ingrid Xhunashi López Pineda

A sunday kind of love, Etta James 

Nacida con el nombre de Jamesetta Hawkins, Etta James nació en 1938 en Los Ángeles. Y aunque nunca conoció a su padre, su madre siempre la apoyó para perseguir una carrera de cantante; le decía que "aunque una canción se haya hecho miles de veces, siempre hay algo propio que le puedes agregar", lo que motivó a la cantante para perseguir sus sueños. 

Etta aprendió de música en la iglesia, y fue encontrada por el caza talentos Johnny Otis, dándole como primer sencillo "The Wallflower". No fue hasta los años 60, cuando la discografía en la que se encontraba la reconoció como una cantante multifacética, haciéndola cantar diversos géneros y estilos, desde Jazz, Baladas y Soul. 

Por desgracia, en el ambiente en el que se encontraba Etta existían varias malas influencias, lo que la terminó convirtiendo en adicta a la heroína, el alcohol y el tabaco, adicciones que le traerían muchas complicaciones a lo largo de su carrera y vida, aunque nunca dejó de lado su personalidad rebelde y un tanto descarada. 

Por otra parte, la canción "A Sunday Kind of Love" fue compuesta por Barbara Belle, Anita Leonard, Stan Rhodes y Louis Prima, publicada en 1946. Ha sido interpretada y grabada por una variedad de artistas, como Jo Stafford y Ella Fitzgerald. En el caso de Etta James, la canción apareció en 1960, en su álbum At Last!

La letra de la canción hace referencia a la soledad y el deseo de vivir un amor de domingo, una pareja que le muestre lo que significa un verdadero amor, donde se deje llevar y le muestre el camino. 

"I want a Sunday kind of love
A love to last past Saturday night
And I'd like to know it's more than love at first sight
And I want a Sunday kind of love..."

En esta versión de la canción es posible identificar esas características del blues, como la utilización de los doce compases y ciertas notas que siguen un patrón repetitivo a través de toda la pieza. Aunque, sin duda, el canto melancólico de Etta James le brinda ese blues tan distintivo, la melancolía y el anhelo de encontrar a ese amor que la haga sentir especial. 

Al escuchar esta canción, lo que más recomiendo es dejarse llevar por los sentimientos que se transmiten a través de la música y el canto. Da la impresión de casi recodar algo que tal vez nunca hayamos vivido, pero que es posible a través de la triste interpretación de la cantante. 

En algún momento todos hemos deseado encontrar a ese amor verdadero, "someone to enfold", alguien a quien envolver entre nuestros brazos y vivir ese amor interminable por el resto de nuestras vidas. Cuando te sientas así, no olvides reproducir esta canción, y dejarte llevar por la esperanza de Etta James, de que algún día todos lo encontraremos. 

Al final, la madre de Etta tenía razón. Aunque esta canción ha sido interpretada cientos de veces por distintos artistas, la versión de Etta James sigue siendo inigualable, logrando dejar su marca personal e inolvidable, que nos hace desear que ese amor dominguero dure toda la vida.

Referencias:

Biography.com editors (2014) Etta James Biography. The Biography. Recuperado de https://www.biography.com/musician/etta-james

Manrique, D. (2012) Etta James, la fiera nunca domada. El País. Recuperado de: https://elpais.com/cultura/2012/01/20/actualidad/1327078925_479708.html

James E. [Etta James]. (2018, diciembre 12) A Sunday Kind Of Love [YouTube] Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=sfPOD2zrQSI