La bella durmiente un clásico de la música y el cine

 Por Arantza Nicolás

El ballet La bella durmiente coreografeado por Marius Petipa y con música de Tchaikovsky, es una adaptación del famoso cuento de Charles Perrault (París, 1628-1703), La bella durmiente del bosque (Perrault, 2005), una de las más famosas escenas de esta obra literaria, ya que es el primer encuentro que tiene con el príncipe; esta obra fue llevada por primera vez a escena en San Petersburgo, y está formada por un ballet en 3 actos con un prólogo y cuenta la historia de amor entre la princesa Aurora y el príncipe Désiré. Con la creación de esta gran obra, en 1890, se establecieron los principios del clasicismo en la danza clásica y, además, se inauguró lo que hoy se conoce como la “Trilogía de Tchaikovsky”, a la que pertenecen las obras del Cascanueces 1893 y El Lago de los Cisnes 1895.

En la actualidad, La bella durmiente es una de las piezas más icónicas, gracias a la publicidad que le ha hecho Disney al momento de decidir llevarla al cine y conservar esta pieza musical tan representativa, sin embargo para poder comprenderla tenemos que recordar que surge durante el Romanticismo, y dentro de este movimiento los temas y los argumentos de las obras van a girar alrededor del amor, en la mayoría de las veces, un amor no correspondido, un amor imposible casi platónico; mostrando un especial interés y fascinación por lo fantástico, los sueños, lo sobrenatural, y en el caso de los ballets, la bailarina será siempre la protagonista que dé vida a los argumentos de las obras.

 

Este tipo de piezas serían objeto de admiración y de idolatría por parte del público de aquella época y sobre la misma protagonista, caerá toda la tensión de la obra, convirtiendo así al principie en un simple bailarín más; por lo mismo durante esta época aparece un elemento trascendental y único en la historia del ballet; pues para realzar la ligereza, la belleza y la idealización de la mujer, se crean las zapatillas de puntas, que permiten a las bailarinas danzar sobre las puntas de sus pies, dando al publico la ilusión de que  flotan sobre el escenario, convirtiéndolo en un lugar mágico, donde lo onírico y lo sobrenatural se hace realidad.

Gracias a estas características, el ballet de La bella durmiente se convierte en un clásico tanto de la literatura, del cine, como de la música, donde no sería posible entenderse una sin la otra; a continuación te dejamos algunos videos de la más reciente versión de esta obra: Maléfica.